Un mundo de leyendas
Las tierras conocidas no bastan a los hombres; siempre se proyectan los anhelos de fantasía y de aventura o las ilusiones de felicidad en territorios lejanos, misteriosos, iluminados por soles remotos y poblados de prodigios.
En el Nuevo Mundo, con la conquista de América, se produce la oportunidad de colocar algunos de los espacios acogedores de mitos y maravillas de la Antigüedad: allí estarán la tierra de las Amazonas, la fabulosa ciudad de Eldorado, las siete ciudades de Cíbola, o la fuente de la eterna juventud.
Cuenta la leyenda que el conquistador español Ponce de León — ya muy viejo y enfermo — buscó afanosamente la fuente de la juventud que se decía estaba en una isla desconocida de nombre Bímini. En sus expediciones encontró lo que es hoy Florida, sin embargo murió sin poderse bañar en las milagrosas aguas que le devolverían fuerzas y juventud.
Internet: <www.factoriaurbana.net> (con adaptaciones).